Los clubes de fumadores no son una novedad en España pero la aprobación de la última ley antitabaco, vigente desde el pasado mes de enero, ha propiciado la proliferación de este tipo de asociaciones, cuya creación permite dicha ley. A los ya existentes, muchos de los cuales temían por su permanencia con la nueva ley, se han sumado ahora nuevos clubes, surgidos por iniciativa de fumadores o anexos a establecimientos hosteleros, que pretenden así dar espacio a sus clientes fumadores.
Este último es el caso del club abierto en Lleida, el primero en su género en esta localidad, y que da nueva vida a la costumbre arraigada de catar puros y brandies en la taberna inglesa de la que depende. En algunas regiones los hosteleros han ido más lejos y preparan de forma conjunta la creación de clubes de fumadores en sus restaurantes, además de implementar innovaciones tecnológicas que hagan más flexible la convivencia entre fumadores y no fumadores en sus establecimientos.
Dado el empuje de este tipo de clubes ha nacido recientemente la Federación Española de clubes privados de fumadores (FECPF), fundada por clubes privados de fumadores para defender sus intereses, siempre dentro del marco legal establecido. La FECPF se ofrece además a restaurantes y establecimientos hosteleros para informarles sobre las restricciones legales que deben cumplir para crear su club de fumadores.
También a la sombra del resquicio legal que permite la creación de clubes de fumadores ha crecido la oferta de servicios de asesoramiento a hosteleros para la creación de clubes y la habilitación de su espacio. Estas empresas, muchas de ellas provenientes del sector construcción o de la asesoría jurídica, brindan ya un servicio completo que va desde la administración legal del espacio, hasta la presentación del proyecto arquitectónico de reforma y la ejecución de la misma.