A 50 días de las próximas elecciones generales, ya se alzan las primeras voces para solicitar a los distintos partidos políticos que tomen partido sobre la ley antitabaco vigente desde el 1 de enero de 2011. El primero en manifestarlo públicamente ha sido el Club de fumadores por la Tolerancia a través de su portavoz, Javier Blanco Urgoiti, entrevistado por Interestanco hace ahora 1 año. En una carta abierta, publicada en el blog de esta organización, Blanco asegura que «llevamos un par de semanas trabajando intensamente, además de en nuestra labores cotidianas diarias, que son la base y que nos absorben mucho tiempo, en preparar el baile político de aquí al 20 N. Porque pretendemos que nos reciban todos los grupos políticos, haciendo uso de la legitimidad que nos otorgan las más de 600.000 firmas recogidas en contra de la ley antitabaco».
Probablemente no será el único colectivo en dialogar con los futuros cargos electos para solicitarles que modifiquen o deroguen la ley antitabaco. Además del sector tabaquero, es probable que estén interesados en hacer lo propio el sector hostelero, que ya salió a la calle en varias ocasiones para protestar contra la ley y que ya ha lamentado las pérdidas que le ha ocasionado. Por supuesto, es de esperar que también se presenten ante los distintos partidos las diferentes asociaciones que representan al gremio de los estanqueros, que han expresado en repetidas ocasiones los perjuicios que le ha causado dicha ley.
Sea como fuere, el cambio o la derogación parecen metas plausibles si se mira al exterior, a distintos países que aprobaron leyes similares y después decidieron modificarlas. De paso, se evitarían otros males secundarios, sobre los que ya alertó el sector tabaquero y estanquero, como el contrabando y la venta ilegal.